En la Comarca de la Jacetania se gestó el primitivo Condado de Aragón, que en 1305, a la muerte de Sancho III “el Mayor” de Navarra adquirió la categoría de reino, con capital en Jaca y con Ramiro I como monarca.
La Comarca Alto Gállego históricamente formaba parte de La Jacetania, siendo el núcleo original del antiguo Condado de Aragón. Los territorios históricos que la integran son el valle de Tena, la tierra de Biescas y el Serrablo.
El ámbito pirenaico que conforma el territorio de estas comarcas posee una gran complejidad estructural, bioclimática y de uso del suelo. La zona axial supera frecuentemente los 2.600 metros de altura y crece progresivamente hacia el este. La unión con la vertiente norte de los Pirineos se realiza a través de collados que se aproximan a los 1.800m y que solo permiten la aparición de dos pasos: Somport (1.640m) y el Portalet (1.792m).
Las características de los suelos, la importancia de la fusión nival, los contrastes térmicos y, en especial, la incidencia del hielo como agente morfogenético hacen de algunos de estos ambientes alpinos ecosistemas muy frágiles. Esta fragilidad es también evidente desde un punto de vista geobotánico y zoogeográfico, pues muchas especies de alta montaña carecen de elasticidad frente a los cambios que se puedan producir en sus biotipos.
En la Depresión intrapirenaica (Canal de Berdún y Bal Ancha) la altitud desciende por debajo de los 500m. Se trata de una depresión de más de 70km de longitud y se extiende desde Yesa hasta la Sierra de Galardón. Destacan San Juan de la Peña (1.552 m) y la Peña Oroel (1.769m).
La Jacetania y el Alto Gállego, situadas en los Pirineos, tienen un clima de montaña caracterizado por variaciones significativas de temperatura y precipitaciones a lo largo del año. Predomina el clima continental de montaña con influencia atlántica. Los inviernos son fríos y largos, mientras que los veranos son suaves y breves.
Estas características climáticas hacen que la Jacetania y el Alto Gállego sean un destino atractivo tanto en invierno, para la práctica de deportes de nieve, como en verano, para actividades al aire libre, como el senderismo y la observación de la naturaleza.